¿Por qué fue necesario el reparto agrario?
Una de las demandas esenciales de la revolución mexicana fue sin duda la exigencia de una retribución de la tierra más equitativa e igualitaria. Al término de la lucha armada, en la década de 1920, México continuaba siendo un país esencialmente rural pues más del 70 por ciento de la población vivía en localidades de menos de 2,500 habitantes. La desigual conformación del México rural posrevolucionario determinó que una de las prioridades de los gobernantes emanados de la lucha armada, fuese llevar a cabo una profunda reforma agraria como la única vía para resolver el futuro del país.
La Reforma Agraria consistió básicamente en dos aspectos: grandes inversiones de capital para modernizar el campo, por un lado, y reparto de tierras a los campesinos y los pequeños propietarios que habían sido despojados durante el Porfiriato, por otro.
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